Pezón invertido

Seguro que has pensado al ver cómo tus pezones no salen hacia afuera como deberían que eso no es normal y que lo tuyo es algo muy extraño.

Sin embargo, casi una de cada 10 mujeres tiene uno o ambos pezones invertidos. También es frecuente en varones, aunque es raro que ellos consulten por este motivo.

En todo caso, tiene solución.  ¡Sigue leyendo!

Vamos a ver en qué consiste el pezón invertido y su clasificación.

Se basan en la dificultad para que el pezón salga hacia afuera.

• Grado 1: Presionando con índice y pulgar sobre la areola, el pezón sale inmediatamente y se mantiene así un tiempo
• Grado 2: Sale al aplicar la técnica del grado 1 pero se invierte de inmediato.
• Grado 3: Es imposible lograr que salga

Esta clasificación sirve para que te hagas una idea de la repercusión que puede tener sobre la lactancia y la posibilidad de corregir el pezón invertido sin cirugía.

En casa:

• Técnica de Hoffman

Aunque su utilidad no está demostrada, está claro que no causa ningún perjuicio, y puede que aplicándola con la constancia adecuada, logre corregir grados 1 o 2 de pezón invertido.

Cada persona es diferente, y no te desanimes si no funciona. Parece que se obtienen mejores resultados si se repite a diario.

El piercing puede ayudar a mantenerlo en la posición adecuada. Lo mejor que puedes hacer es comentar tu caso con el profesional antes de acudir a su centro, y que te informe de si tiene experiencia o no. El local, evidentemente, debe reunir adecuadas condiciones higiénicas y de salubridad.

El profesional deberá lograr que el pezón salga completamente, para lo que deberá usar pinzas de pezón, lo que puede hacer la colocación del piercing más dolorosa, pero esta maniobra es fundamental para que, al insertar el piercing, se corrija la inversión del pezón.

Esta técnica no es eficaz en muchos casos. Habla con tu cirujano y el profesional con el que piensas colocarte el piercing para valorar las diferentes opciones.

Aunque la técnica del paracaídas se ha descrito en numerosas ocasiones y teóricamente permite que sea posible la lactancia, dado que es menos eficaz y existe la posibilidad de que no permita la lactancia, en GodoyClinic apostamos por la técnica más definitiva, que implica, eso sí, eliminar los conductos galactóforos, causantes últimos de la retracción del pezón. Por lo tanto, después de la cirugía de corrección de pezón invertido, no es esperable que puedas dar el pecho. En todo caso no debería afectarse la sensibilidad del pezón.

Tras aplicar anestesia local, se saca completamente el pezón mediante una sutura. Manteniendo esta tensión, se realiza un pequeño orificio en la base del pezón, y se introduce una hoja de bisturí, con la que se cortan los conductos de la leche que van por el interior del pezón. Inmediatamente se aprecia que el pezón ya no se invierte. Unas suturas especiales mantienen el resultado de forma definitiva. La cirugía no duele más allá de las molestias, momentáneas, que provoca la aplicación de la anestesia local. En unos días se retiran las suturas. No debería haber dolor en el postoperatorio más allá de un leve escozor.

Pueden dificultar dar el pecho, aunque en general, es raro que sea imposible por los pezones invertidos. En último extremo, la opción de las bombas de lactancia ( sacaleches) lograrán que tu pecho produzca suficiente leche para tu bebé.

Los nervios sensitivos no están afectados por la condición de pezones invertidos. Por ello, no debería haber ninguna diferencia en cuanto la sensibilidad erógena por el hecho de tener pezones invertidos.

La inversión de los pezones no debe preocuparte, en general, si

• Ha estado presente desde la infancia o la pubertad.
• Ocurre gradualmente, a lo largo de años
• Viene relacionado con embarazo, lactancia o cirugía mamaria

Si se desarrollan a lo largo de pocos meses, la inversión del pezón puede ser un signo raro de cáncer de mama, por lo que debes consultar con tu médico de cabecera o ginecólogo.

Por otro lado, la cirugía de aumento de pecho puede simultanearse con la corrección del pezón invertido.